Terminé conmigo...

Esto se acabó... ya no la soporto más, estoy harta de los malditos estados inestables, que caras largas, que malos tratos y achaques estúpidos sin motivos. No soporto la pereza y la flojera mental, odio verla sumida en una apatía eterna, por más que hace muchas cosas, no la están enriqueciendo, más bien, le están agotando las pocas energías. No hay motivación, se alteró su comportamiento, anda extraña, no se conforma. Se volvió loca... tiene todo a sus pies y no lo ve!

Igual la voy a ayudar, conversaremos largo y tendido. Qué le sucedió, extraño así como era antes, simple y directa, hoy parece no más que un pollo perdido en el gallinero. Es mejor que se vaya como dice, que se sane, se replantee y regrese como nueva, ágil, alegre y chillona como siempre fue.