miércoles, 24 de noviembre de 2010

Taller de educación en derechos humanos

He estado pensando en esta actividad que me han propuesto participar. La intención es transmitirle a grandes y chicos principalmente, la importancia de este tema y cómo podemos aplicarlo día a día. Internamente me pregunto cuáles serán los temas a tratar. Primero creo que los derechos humanos se centran en el valor del respeto por uni mismo y por los demás. ¿Cómo transmitir a estos participantes que es obligación respetar? ¿cómo explicarles que aunque nos lastimen en la forma que sea, no debemos responder de la misma manera? ¿con qué ejemplos evidenciar que es posible vivir en un mundo sin violencia? ¿de qué sirve el taller de derechos humanos si no existen tales derechos?

No sé cómo plantear esta parte del taller, tampoco sé si debo exponer con ejemplos reales de violencia, tampoco si debo inculcar el miedo hacia quienes tienen el poder o al revés, motivar el rechazo hacia ellos.

Me han pedido asociarlo a la parte ambiental y pensaba que si las personas no se respetan entre si, el medio que los rodea pierde valor y con mayor razón potencia la destruccción.

Necesito ayuda!

miércoles, 10 de noviembre de 2010

Tuve un sueño muy extraño...

Estaba sola en el mar, en una playa y hacía calor. Recuerdo que estaba enferma y estilando después de haber estado en el agua mucho tiempo, caminaba hacia la ciudad y necesitaba un médico. De pronto, llego a un hospital muy grande, húmedo y antiguo. Sabía que la gente que estaba ahí era misteriosa y mala, se trataba justamente de un hospital nazi, en mis pensamientos sabía que estábamos en una guerra silenciosa, yo era alemana y estaba en contra de las cosas que contaban, estaba en conocimiento de todas las atrocidades y les tenía miedo a los oficiales de la SS. Con una valentía simulada, hablé con una mujer que parecía enfermera, me dijo que esperara en una sala al doctor. En la espera, me dieron ganas de ir al baño y me indicaron que en piso de más arriba había uno. Subí rápidamente las largas escaleras y me encontré con una persona sentada en una silla de dentista al cual le estaban haciendo un agujero con un instrumento similar a un taladro pequeño. Lo espantoso era que lo habían anestesiado al lado contrario de donde estaban "tratándolo"y yo escuchando las súplicas de este desconocido paciente. Sentí más pánico y bajé al piso donde me encontraría al doctor. Apenas llego abajo sale el médico a buscarme y le dije que ya era tarde que debía irme y él me habla con un tono tan irónico y desagradable que no dudé en huir, de verdad me asusté, creí que podrían relacionarme con judíos, lo que me atemorizaba de solo pensarlo.

Fin.


Desperté en shock y no lo olvidé en todo el día.