jueves, 7 de abril de 2011

Cosas por hacer

Tomé una vez más la misma decisión. Lo escribo de nuevo para recordármelo. Cumpliré 29 años y aún no me siento totalmente satisfecha de mí misma. Aburrida de cometer siempre el mismo error decidí tomar acciones al respecto. Desde hace un tiempo me detuve, es decir, mi hiperactividad se transformó en un letargo permanente. me gustaba tener muchas cosas que hacer, aunque siempre reventaba de lo cansada. Hoy siento que se me pasó de largo todo lo que quería hacer y no en la pega precisamente. Mi trabajo es perfecto, siempre pasan cosas malas, desiluciones varias pero me desarrollo profesionalente de la manera que me gusta. Es lo que pasa después cuando sales del trabajo entre las 7 y las 11 de la noche. De lunes a viernes frente a las 2 pantallas del notebook y del televisor, ambas al mismo tiempo haciéndome perder miserablemente el tiempo. me descansan la cabeza, no hay duda pero para mí no es suficiente. hay días en que no tengo energía para nada, quiero la cama, cerrar los ojos y morir dormida. hay otros días en que mi mejor panorama es hacer el aseo, nada peor que eso. Otros días lo mejor es jugar con el hurón, lo pasamos excelente. Otros días coincidir ver una película con mi pololo, porque a veces yo las veo sola mientras el juega con su notebook. Hay veces en que ambos salimos a divertirnos fuera de casa, lo que tiene pros y contras, principalmente agotador cuando debes regresar a casa. Con lo de los miércoles dedicados a los derechos humanos está bien, me pone feliz, pero no me divierte, es súper duro enterarse de las mierdas en las que vivimos. Me falta algo más de diversión, tal vez empiece a tejer o de repente juntarme con mis amigas y amigos que tengo abandonados. Antes iba a mis clases de baile, cantaba, carretiaba caleta y ahora me he convertido en una bolsa insípida. Mi espejito espejito me dijo que estaba toda cagada, que recién tengo 28 años (casi 29) pero que tengo tanto por hacer y no hago nada. Así sufro pensando de nuevo en mi lecho de muerte cuando sea vieja y me arrepienta ahí mirando el techo pensando lo que podría haber sido o pasado. Me da miedo perder el tiempo, llegó abril y maté 3 meses que no recuerdo qué hice. Pasarán otros 3 sin saber qué hice una vez más y después otros tantos y se acaba el año. De lo único que me acuerdo es del trabajo y mis entregas de proyectos. Será un problema de memoria? iniciativa? desidia de vivir? Lo único que tengo claro es que algo pasa, me desespera y me presiona al cambio.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Hola Yiya, es la primera vez que escribo en un blog, hasta ahora recurría desesperada a amigos que me escuchaban al otro lado del teléfonp. Lo que noto en tí, es hastío, algo te falta a pesar de que lo tienes todo. Si me permites que te lo diga claro, aunque creo que uno escribe estas para sí mismo, realmente no te conozco pero algo me ha sonado a lo que a mi me pasa.
Yo tengo 33 años y llevo ya muchos años en los que no sé cual es realmente mi rumbo, en el que parece que los demás han decidido por mi, que yo hge dejado que decidan por mi, y como todo va tan rápido, ni me paro a pensar qué hay ahí fuera.
Amigos abandonados, relación de pareja al traste, actividades lúdicas desplazadas por series de TV, conversaciones telefónicas convertidas en mensajes de whatsapp... y ahora ni siquiera me siento eficiente en el curro...
entonces me entra la ansiedad y me pongo a llorar mientras hago esa compra que no necesito porque lo único que quiero es meterme en la cama y no despertar.
Espero que tú te sientas mejor.