sábado, 4 de julio de 2009

Las vidas que vienen y se van

Nació Emilita, un día 3 de julio a las 8 y 20 de la noche hora chilena. Se parece a su papá Mario, pero tiene los ojos de su mamá Caro. Llegó justo a tiempo, ella traerá felicidad a la familia en un momento de tanta pena. Verle su carita y como va creciendo todos los días, nos hace pensar en lo que tiene por vivir y todo lo que compartirá con todos nosotros, especialmente sus 4 abuelos, tías y otros primos. Estamos tranquilos, pensando en ella, en la compañía permanente que tendrá la Caro, la mantendrá ocupada y feliz, un bebé siempre da mucho que hacer. Eso nos tranquiliza aquí, estando tan lejos de ellos por suerte no por mucho tiempo, a final de cuentas, 2 años no son tanto. Como dice una tía, se aprecia más la luz, desde la más completa oscuridad. Otra tía me dijo, hay alguien que nació para cumplir todos aquellos deseos de quien no los pudo realizar. Una vida que empieza llena de amor, aparece justo cuando otra se va con tanto dolor, son cosas que hay que vivir, nos guste o no.

No hay comentarios: